EUGENIA TODD
EUGENIA TODD
¿Habéis tenido alguno de vosotros,
caminantes,
una muela que os causara continuo
malestar?
¿O un dolor permanente en el costado?
¿O un bulto maligno que siguiera
creciendo?
¿Y tales que hasta en el sueño más
profundo
siempre tuvieras la oscura consciencia
o el fantasma del pensamiento
de la muela, del costado, del bulto?
Así, un amor contrariado, o una
ambición fracasada,
o un error en la vida que te amargó
desesperadamente hasta el final,
como una muela o un dolor en el
costado,
flotarán en tus sueños en el sueño
final
hasta que te llegue la perfecta
liberación
de esta esfera terrena, y te sientas
como quien despierta
curado y alegre en la mañana.
DATOS DEL AUTOR: Edgar Lee Masters (Garnett, 1869 - Melrose Park, 1950) Poeta estadounidense.
COMENTARIO: En esta ocasión, traemos este poema, para presentar el libro que lo contiene: ANTOLOGÍA
DE SPOON RIVER. Esta obra es un clásico dentro de la literatura anglosajona. Para no repetir tópicos, que podéis encontrar en múltiples sitios de la red, añadiré simplemente, que es un libro de poesía global en cuanto al planteamiento. De hecho, se puede leer como una novela. Cada poema, epitafios todos, está en relación con otros poemas-epitafios. Y al lector le compete la tarea de formar en su imaginario la historia viva de ese pueblo llamado Spoon River.
Lo bueno del libro, bajo nuestro punto de vista, recae en el hecho de que la mayoría de los poemas-epitafios, pueden leerse individualmente, perdiendo otra lectura más exacta de la obra, quizá, pero con la garantía de disfrutar con la lectura de poemas sueltos. Como en este caso. ¿Cuál sería la vida de Eugenia Todd, qué le ocurriría en Spoon River para relacionar el dolor físico (¿Habéis tenido alguno de vosotros,
caminantes,/una muela que os causara continuo
malestar?) con el dolor espiritual de una manera tan sugerente y aparentemente simple?
Los Epitafios, las palabras y expresiones que ponemos sobre la tumba, son una fuente de riqueza creativa, porque nos fuerzan a pensar e imaginar de una manera definitiva, quiénes somos y cómo hemos entendido nuestros pasos por este mundo. ¿Has pensado ya el tuyo?, ¿te atreves a ponerlo en la zona de comentarios que aparece más abajo?
Mi destino es construirlo
ResponderEliminarMe parece perfecto. Pero imaginarlo de epitafio, en una lápida a ras del suelo, por ejemplo, me sorprende y me confunde. Aún así, seguiré pensándolo
EliminarGracias por el comentario