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Mostrando entradas de noviembre, 2020

EZ DUGU EGUZKIA HELBURU / NO BUSCAMOS EL SOL

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  Ipurtargiak ez du eguzkia helburu. Ematen du bere burua ikusteko lain argi; eta nahikoa zaio nor den ez ahazteko.   Gure plazetako farolek ere ez dute eguzkia ordezkatu nahi, elkar ikusteko lain argi ematen digute. Eta nahikoa zaigu argi nabar hori batak bestea besarkatzeko. Nahikoa zaigu plazetako farolen argi horia konstelazio berriekin amesteko.   Ipurtargiek bezala, guk ere, ez dugu eguzkia helburu, nahikoa zaigulako gure herrietako farolen epela elkarrekin bide berriak argitzeko.     NO BUSCAMOS EL SOL   La luciérnaga no busca el sol. Da suficiente luz como para reconocerse; y le basta para no olvidar quién es.   Las farolas de nuestras plazas tampoco buscan sustituir al sol, dan luz suficiente como para vernos. Y nos basta esa luz pálida para abrazarnos. Y nos basta la luz amarilla de las farolas de las plazas para soñar con nuevas constelaciones.   Igual que las luciérnagas, nosotros tampoco aspiramos al sol. Nos basta el

ESTOS DEDOS QUE BAILAN

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Nosotras, en el patio de atrás de una casa muy grande, oreando el rencor con los brazos en alto y el dolor de los siglos en los hombros. Nosotras, estirando este rencor tan blanco, dejando que todo el sol del mundo lo atraviese. Nosotras, vigilando el fuego de otros, cocinando los huesos de otros para hacer esta sopa que a otros servirá de alimento. ¿Y qué tenemos nuestro más allá de estos dedos que bailan alrededor del cuello de las bestias, de estos dedos que matan con un movimiento rápido, preciso, y cocinan lo muerto para dar de comer a una estirpe maldita? Nosotras y el rencor que se tiende en los patios traseros de las casas. Nosotras: ¿para cuándo otras manos, otra historia, otra estirpe? DATOS DE LA POETA :  Olalla Castro (Granada, 1979) es doctora por la Universidad de Granada (su tesis sobre la narrativa de Enrique Vila-Matas recibió el Premio Extraordinario de Doctorado) y licenciada en Periodismo y Teoría de la Literatura. Su primer poemario,  L

ESPERANDO A LONG JOHN

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ESPERANDO A LONG JOHN  non avises   entra   como entran os piratas á procura do tesouro   non avises   rube laña anega   non avises   incendia   ESPERANDO A LONG JOHN (Castellano)     no avises   entra   como entran los piratas a la caza del tesoro   no avises   trepa hiende anega   no avises   incendia DATOS DE LA POETA : Begoña Paz  Licenciada en Filología Inglesa por la UNED, realizó un posgrado en cultura y violencia de género y un máster en Literatura Hispánica (Catalana, Gallega y Vasca) en el contexto europeo. A pesar de estar escritos exclusivamente en lengua gallega, sus poemas fueron antologizados en versiones bilingües gallego-castellano, junto con los de otros escritores del castellano. Dentro de su poesía destacamos:  A mala vida , 2011 y Caja de las bestias . Caixa das bestas , 2020, bilingüe, al que pertenece este poema. COMENTARIO: A veces los po emas lo sostiene una sonorida

REALIDAD VIRTUAL

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No borres los e-mails en los que alguien jura que te ama: pruebas irrefutables de que el amor existe aunque el mensaje tenga diferentes destinos. Cuando los días ensayen su torpe vals por los confines del planeta los kilos de más nos corten el aliento y el pelo vacacione en un héroe de cosplay los mensajes estarán ahí para decirnos “un día fuimos alguien en la vida de otros.” DATOS DEL POETA :  Margarito Cuéllar. Escritor, periodista, editor, promotor cultural y maestro universitario. Nació en Ciudad del Maíz, San Luis Potosí, México en 1956. Maestro en Artes por la Universidad Autónoma de Nuevo León; doctorando en Artes y Humanidades en el Instituto de Comunicación, Artes y Humanidades de Monterrey.   De 1982 a esta parte he publicado 19 libros de poesía, entre ellos: Teoría de la belleza (Instituto Sinaloense de Cultura, 2018); Moléculas en movimiento vibratorio alrededor de una posición de equilibrio (Univ. Autónoma de Coahuila, 2016); Las edades terrestres (Gob. de San L

PADRE

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  La prudencia fue una lección aprendida de las manos de mi padre; firmes y rojas, adornadas con surcos desde donde no se intuyen los pliegues del corazón.   Nace la vastedad de piel trabajando la orilla de la vida, los árboles cítricos, el mimo aplicado a un pedazo de tierra. Luego será esperar el crecer de las horas, escuchar las señales que dejan al comunicarse los pájaros en el aire.   El sol abona el tacto erguido en las manos y en cada arruga se levanta un testimonio al tiempo, arqueología desde donde aprender de la paciencia y de la historia.   Me parece que él sabía hablar del amor sin apenas nombrarlo.                                                                                                                                                 (Inédito)       DATOS DE LA POETA : Estefanía Cabello (Córdoba, 1993). Graduada en Filología Hispánica por la Universidad de Córdoba.  Doble máster en profesorado e investigación en Literatur