REALIDAD VIRTUAL

No borres los e-mails en los que alguien jura que te ama:

pruebas irrefutables de que el amor existe
aunque el mensaje tenga diferentes destinos.

Cuando los días ensayen su torpe vals
por los confines del planeta
los kilos de más nos corten el aliento
y el pelo vacacione en un héroe de cosplay
los mensajes estarán ahí para decirnos
“un día fuimos alguien
en la vida de otros.”

DATOS DEL POETA: Margarito Cuéllar. Escritor, periodista, editor, promotor cultural y maestro universitario. Nació en Ciudad del Maíz, San Luis Potosí, México en 1956. Maestro en Artes por la Universidad Autónoma de Nuevo León; doctorando en Artes y Humanidades en el Instituto de Comunicación, Artes y Humanidades de Monterrey.

 De 1982 a esta parte he publicado 19 libros de poesía, entre ellos: Teoría de la belleza (Instituto Sinaloense de Cultura, 2018); Moléculas en movimiento vibratorio alrededor de una posición de equilibrio (Univ. Autónoma de Coahuila, 2016); Las edades terrestres (Gob. de San Luis Potosí, 2016); Cantos para el único brazo de Blaise Cendrars (Papeles Privados, 2015); Las edades felices (Hiperión/ UANL, España-México, 2013 y 2015); Baladas a las estudiantes que se gradúan (El Quirófano Editores, Guayaquil, 2013); Cuaderno para celebrar (El Zahir Editores, Bogotá, 2012) y Estas calles de abril/ Saga del inmigrante (Aldus/ UANL, 2008), entre otros.

Recientemente ha sido reconocido con el XL Premio Hispanoamericano de Poesía Juan Ramón Jiménez.

Fuente: http://cuellarletras.com/

COMENTARIO: Imaginad a una persona de entre 12 y 45 años esperando el metro, ¿qué hace? Seguramente la mayoría dirá que, mientras espera, entretenerse con el móvil. Mirad a vuestro alrededor ahora mismo, casi en cualquier circunstancia y lugar, casi en cualquier escenario, incluso si os encontráis en casa o en el aula, ahora mismo, la vida nos pasa entre las manos mediante un dispositivo móvil. Puede que incluso, si falla la pizarra digital, estéis leyendo esto en uno de ellos, si el centro lo permite. La llamada realidad virtual no es algo ajeno a nuestra realidad cotidiana y, en muchos aspectos, la conforma y la determina. Tenéis razón como estudiantes, ¿por qué renunciar a ella?

Si lo pensáis, casi sin querer, aunque sea a iniciativa del docente de turno, la lectura la estáis haciendo de manera virtual y en streaming. Porque renunciar a sus posibilidades es un craso error. Gema LLuch hace tiempo que lo viene diciendo, con los tuits, los blogs, los canales de YouTube o con Instagram se ha transformado la manera de leer, de relacionarse con la lectura y con los libros. Si ahora además le añadimos tik tok, ni te cuento.

Por consiguiente, no debe extrañarnos que la poesía se inspire en el mundo virtual para crear magníficos poemas como el de Margarito Cuéllar. A todos los usuarios nos sucede lo que describe. De repente, en un email o en una difusión de WhatsApp, o en Facebook (si eres mayor), o en Instagram (si eres mayor, pero no tanto), recibimos un mensaje al azar, aleatorio. Y muchas veces, obviamente, y con buen criterio, lo borramos sin abrirlo, va directamente al spam o la papelera y ahí acaba todo. Pero esta vez, la mirada del poeta se detiene o va mucho más allá, porque descubre en ese tipo de mensajes algo que merece nuestra atención.

Un mensaje de amor, impersonal tal vez, pero que a cualquiera puede llegarle muy hondo. La soledad, la distancia, el desamor o la tristeza es patrimonio de cualquier usuario con una cuenta de correo. ¿Quién no se siente solo alguna vez?, ¿quién no está o ha estado lejos de la persona amada o es víctima de la distancia o el desamor?, ¿quién no está triste y, aún así, abre el correo electrónico o el messenger sin esperanza, para encontrar un poco de luz? Alguien, desde el otro lado, nos conoce y nos recuerda y nos ama porque compartimos un amor que no se olvida, que es imposible depositar en la papelera de reciclaje, por mucho tiempo que haya pasado.

Al encontrar ese mensaje, al azar, ¿impersonal?, carne de spam, tal vez, nos esté avisando de nuestra necesidad de compañía, de cariño, de un abrazo que ahora nos aparece imposible, pero que, aunque sea virtualmente, llega y nos reconforta. Un día fuimos alguien/ en la vida de otros. Imposible no repetir esos versos al final del poema y no admitir su verdad. Nadie es imprescindible, nadie es la sal de la tierra, pero siempre alguien lo es para otra persona, incluso aunque sea por puro algoritmo, por puro error. Hay algo muy moderno en el poema (muchos lectores ignorarán incluso que significa cosplay, si no tiene a frikis cerca que les gusta el manga o el anime): el uso de un lenguaje actualizado. Y es que los buenos poetas, como Cuéllar, saben escuchar las palabras que nos rodean y no renuncian a ellas para contar algo muy antiguo y que forma parte de la tradición poética de toda la humanidad (desde México a Marchena, en adolescente y en adultos): necesitamos palabras que nos nombren, que nos acaricien, que nos abracen como si fuéramos la parte amada de un amante sincero y bondadoso.

 Y es cierto también que el mundo de la realidad virtual no tiene nada de sincero o bondadoso: el ciberbullying, por ejemplo, la violencia multiplicada contra las mujeres, las fake news (incluso con poemas que pululan por la red con autoría confundida) y todas las posibilidades de manipulación y aumento de las desigualdades son creadas, alimentadas y distribuidas desde esa realidad virtual que forma parte indisoluble de nuestras vidas actuales. De manera sistemática e interesada desde poderes fácticos y económicos que las usan para su propio beneficio. Y, sin embargo, aquí está el poema de Margarito Cuéllar para mostrar que otra realidad (virtual) es posible, que otra mirada inteligente sobre lo anterior tiene cabida si usamos la literatura en general, y la poesía en particular, para defendernos, incluso con mensajes de spam o usando redes como tik tok.

De hecho, si no fuera por las redes sociales, a un profesor como yo, alejado del mundo literario, le resultaría imposible involucrar a poetas como Margarito Cuéllar en este Proyecto Aniversario. Las redes sociales, pese a todos los intereses especulativos que la sostienen, frente al poder de manipulación que conlleva, incluso reconociendo la fuente de fake news que generan, contienen un elemento crucial frente a fríos algoritmos: en las redes hay personas. Personas tan generosas como el poeta mexicano que nos ha regalado este poema a los lectores del blog y al alumnado del IES López de Arenas, por inclusión. Espero que reciban el regalo con el entusiasmo que merece el esfuerzo de Cuéllar y con el que hemos afrontado este poema de la semana.

ACTIVIDADES:

En su página oficial hay un espacio en el que encontrarás algunas entrevistas. Léelas desde aquí. Sobre todo, la aparecida en El Universo  y las 25 Instantáneas y  ¿Qué te parece su forma de entender la poesía?, ¿crees que para él la poesía tiene algún sentido hoy en día? Justifica tu posición partiendo de esos artículos.

En una de ellas, se refiere a un cadáver exquisito, un juego surrealista muy interesante (busca información de cómo hacerlo). Intenta uno en clase con tus compañeros. 

También te proponemos hacer algo parecido con los poemas de Margarito Cuéllar. Tenéis que buscar poemas suyos (por ejemplo aquí), elegir versos e intentar esta actividad que ya hicimos con otros poetas en  Versiones y diversiones. 

Las narrativas digitales son un buen medio para escribir de manera conjunta. Te dejamos dos modos de hacerlo que ya hemos ensayado el curso pasado, mediante Instagram o mediante WhatsApp. 

Para los alumnos y alumnas audaces, os proponemos leer o recitar un poema corto, por ejemplo, el de esta semana en Tik Tok y etiquetar a la cuenta de la biblioteca, @bibliotecaiesla2020, para compartirlo en dicha red con los hashtags #poesía #iesla #unpoemacadasemana. No te olvides del nombre del autor del poema y el título.

En este mismo blog subimos un poema que cuenta algo relacionado o parecido con el poema de Margarito Cuéllar. Alguien anónimo escribe un poema de desamor y lo sube a la red. Alguien famoso lo lee en una despedida a una persona querida que ha fallecido. Se hace viral el poema y la confusión. Si quieres volver a conocer esta historia que me descubrió un alumno. Lee: RECUÉRDAME

Visita la página oficial del Premio Hispanoamericano de Poesía JRJ, pinchando aquí. Elige tres autores premiados, busca datos sobre su vida y su obra y comparte algún poema que te guste.

Sin que sirva de precedente, dejo una actividad para docentes interesados en la lectura en estos tiempos y en estas condiciones. Simplemente leer el siguiente artículo de Gemma Lluch y extraer conclusiones del mismo para la práctica en el aula: Jóvenes y adolescentes hablan de lectura en la red.

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