HOMBRE (DÍA DE ANDALUCÍA)

Hombre
un día llegará
que te despiertes
pensando que eres algo.

Hombre

un día llegará

que te levantes
siendo más que una cosa
siendo ya casi un hombre.

Hombre
ese día los cielos
que te esclavizan
te negarán su ayuda.

Hombre
ese día la tierra
que te malquiere
te volverá la espalda.
Tierra y cielo enemigos.

Pero ese mismo día
Hombre
sin darte cuenta
te nacerá la vida
y antes de que te duela
Hombre
te darás cuenta
que se ha muerto la muerte.

DATOS DEL POETA:  Agustín Gómez Arcos (Enix, Almería, 1933- París, 1988) es un escritor andaluz olvidado o, al menos, no muy citado en los libros de texto. A mediados de los años cincuenta se traslada a Madrid, donde trabaja como actor, director de teatro y traductor. Su labor como dramaturgo se ve premiada en dos ocasiones con el Premio Lope de Vega, pero la censura prohíbe la representación de sus obras. Acosado por la dictadura, decide exiliarse: primero en Londres, y, a partir de 1968, en París, donde publica catorce novelas en francés, obtiene, sin embargo, numerosos premios literarios ―finalista del Premio Goncourt en dos ocasiones con Escena de caza (furtiva) y Un pájaro quemado vivo― y es condecorado con la Orden de las Artes y las Letras de Francia, con grado de caballero (1985) y oficial (1995). La Editorial Cabaret Voltaire ha publicado su Poesía, que básicamente son dos poemarios: Ocasión de Paganismo y Pájaros de Ausencia, junto a otros poemas sueltos.

Su obra forma parte del programa educativo de los liceos franceses. Está enterrado en el cementerio de Montmartre.

COMENTARIO: Un Hombre es una historia y un olvido. Una historia de un niño sin pan, republicano (hay poemas sobre su infancia que describe las pintadas insultantes de vecinos fascistas y la impotencia del padre ante tales abusos), que pasa de pastor de cabras en un pueblo pequeño, a trabajar de friegaplatos o contable en París. Y de ahí, por su propio talento literario, a un reconocimiento internacional más que merecido. Pero un Hombre también puede ser un fantasma, alguien que no  se conoce porque no aparece en los espejos que muestran la realidad (sus novelas se traducen a una veintena de lenguas, pero en España no se publican siquiera). Un Hombre puede vivir al margen, vivir fuera y conscientemente de los márgenes establecidos. Un Hombre puede ser un extraño en un país vecino, pero también en la propia patria. Porque a veces, un país, aunque sea el propio, también es un obstáculo constante, una negación incesante y sistemática de una voz, de una persona que no comulga con lo que la mayoría impone.

Por todo lo anterior, no debe sorprendernos el poema de Gómez Arcos. Él descubre qué significa ser Hombre en el sentido amplio y auténtico de la palabra. Alguien que no se pliega, que se levanta contra las circunstancias, contra las injusticias, e intenta vivir su vida con dignidad, porque no quiere ser una cosa, un objeto que se pueda disponer al antojo de otros. 

El Hombre del poema es un hombre libre. Pero sucede que todo se vuelve en su contra: el cielo y la tierra abomina de esa conciencia de libertad, que en el caso del poeta almeriense, le ha servido para defender a los débiles y ninguneados por el poder. Un pasaporte directo hacia el olvido y el silencio, porque al poder le incomoda este tipo de escritores, de poetas que se comprometen y denuncian lo que todos vemos: miseria, dolor, desigualdad social, abuso de poder, etc. 

Y al final, si ese Hombre se da cuenta de su propia vida, de su propia dignidad y de su capacidad para cambiar las condiciones sociales que le ha tocado vivir, entonces, nos recuerda el autor de Pájaros de Ausencia, la derrota, el miedo, incluso la muerte, puede cambiar de bando. En ese momento, la vida terminará por cobrar sentido. Ojalá ese Hombre se parezca al que Blas Infante concibió como arquetipo de andaluz, que se levante, que pida tierra y libertad, y que no se convierta en todo lo contrario: un hombre oscuro, sin capacidad de reivindicar lo justo o con miedo a la libertad y a la defensa de los Derechos Humanos. Sería un flaco favor a nuestro himno y un nuevo olvido a voces como las de Agustín Gómez Arcos, escritor rebelde, subversivo, que, desde luego, nosotros reivindicamos como necesarios en los libros de texto.

ACTIVIDADES:

• Busca información sobre las obras de teatro de Agustín Gómez Arcos. ¿Qué destacarías, en general, de ellas? 
• En el poema, hay algunas estrofas que recuerdan al Himno de Andalucía. ¿Encuentras dicha relación? Explícala con tus palabras.
• Escucha esta otra manera de entender qué significa ser de Andalucía. ¿Qué conclusiones puedes extraer de este tema? Busca información sobre la importancia de Lagartija Nick en la música andaluza y, en especial, con Enrique Morente y su fundamental Omega. ¿Te parece la fusión de este grupo y el cantaor granaíno un ejemplo de la identidad andaluza? Razona tu respuesta.

• ¿Qué te parece que este escritor almeriense se estudie en los centros educativos de Francia y no aparezca en los libros de texto de Andalucía?
  

• Escucha el siguiente audio: 
  

El exilio republicano en Gran Bretaña

¿Qué conclusión extraes del programa anterior?

• ¿Qué significa autoexiliarse? ¿Crees que hoy en día hay personas que se exilian en España? ¿Por qué razones te exiliarías tú?
  

• En este blog hay algunos poemas dedicados a esta efeméride: HIMNO PROFANO, SIESTA,  CANTE MINERO, S.O.S. SUR, elige el que mejor se adapta a Andalucía y justifica tu elección.
• Haz un comentario de esta entrada. También puedes dejar uno en relación con la efeméride.