HISTORIA DE ESPAÑA (NUDO) (POEMA PARA CELEBRAR EL DÍA DE LA CONSTITUCIÓN)
Un nudo. Esto, explica
la anciana,
fue lo último que
hizo mi padre
con sus propias manos.
Un nudo.
Piénsalo.
Es lo último que hace
ese hombre
con sus propias manos.
No estrecha entre sus
brazos
a su madre, a su hermano
o a un amigo.
No acuna en ellos a su
hija recién nacida.
Tampoco le acaricia las
nalgas a su mujer,
ni le acaricia los
pezones, los pechos,
las mejillas, el pelo tan
siquiera... No,
con ellas, con sus
propias manos,
lo último que le
permiten hacer a ese hombre
antes de fusilarle
y arrojarlo a una fosa
común es
Un nudo, repite la
anciana
para las cámaras de
televisión
de un canal de historia.
Historia
de España: de un tajo,
el entierramuertos cortó
el cordel
que el padre de la
anciana
se había atado alrededor
del tobillo
para responder así a la
pregunta
que horas antes le había
hecho su mujer:
¿Y cómo vamos a
distinguir tu cuerpo
entre todo este montón
de cadáveres?
Mientras aparecen los
títulos de crédito,
la anciana le da un beso
al cordel,
y luego devuelve a su
caja de pino
este nudo
que todavía nadie,
repito, nadie, se ha molestado
en deshacer.
DATOS DEL POETA: David González, entre otras obras destacamos: El hombre de las suelas de viento; El demonio te coma las orejas; El amor ya no es contemporáneo. En cualquier caso, su obra también aparece en Feroces (radicales, marginales y heterodoxos en la última poesía). Participa regularmente en los encuentros anuales Voces del extremo que, auspiciados por la Fundación Juan Ramón Jiménez, organiza el también poeta Antonio Orihuela. Desde comienzos de los noventa, es director de la colección de poesía Zigurat, que edita el Ateneo Obrero de Gijón.
COMENTARIO:
DATOS DEL POETA: David González, entre otras obras destacamos: El hombre de las suelas de viento; El demonio te coma las orejas; El amor ya no es contemporáneo. En cualquier caso, su obra también aparece en Feroces (radicales, marginales y heterodoxos en la última poesía). Participa regularmente en los encuentros anuales Voces del extremo que, auspiciados por la Fundación Juan Ramón Jiménez, organiza el también poeta Antonio Orihuela. Desde comienzos de los noventa, es director de la colección de poesía Zigurat, que edita el Ateneo Obrero de Gijón.
Página Oficial del poeta: http://ellenguajedelospunos.blogspot.com.es/
COMENTARIO:
Hay nudos corredizos, nudos de vaca,
nudos de pescador y de cazador, nudo de ladrón, de cirujano, de
barrilete, de ocho, incluso de culo de puerco. Cada cual para una
finalidad, cada uno con una historia propia y un arte característico,
cada uno inventado por una circunstancia. Pero también hay nudos en
el estómago. Se producen cuando la realidad golpea de tal modo que
la náusea, el asco o el vértigo se transforman en una reacción
orgánica. No es casi dolor, es más bien algo duro que se apoltrona
en la boca del estómago, una sensación horrible, de angustia o
ansiedad que hace que doblemos la espalda. ¿Y la razón? Un poema
como este de David González.
No cuesta imaginar al poeta frente al
televisor poniéndose en situación de la narradora. Una persona
mayor que no pudo conocer a su padre. Un padre -¿qué habrá hecho?,
no lo sabemos y no debe importar demasiado-, que no tiene la
oportunidad de despedirse, salvo con una señal en forma de nudo,
antes de formar parte del anonimato, de las cunetas, del olvido de la
memoria histórica de nuestro país. “Piénsalo”, nos indica en
un solo verso desnudo y listo para dar un salto inconcebible.
Lo que se cuenta es un capítulo
concreto de la Historia de la Infamia en nuestro país. Un relato,
como hay miles, truncado y bajo tierra, en muchos caso durante 80
años. Son crímenes sin resolver, que buscan con dignidad la
reparación y la verdad. Y es cierto que oficialmente, la Ley de
Memoria Histórica lo reconoce, cuando se afirma, por ejemplo, lo
siguiente:
Hace setenta años la dictadura franquista vertebró su régimen represor mediante la promulgación de leyes especiales con un objetivo bien claro: continuar, ya durante la larga posguerra, la persecución de los contrarios o desafectos al Nuevo Estado, mediante incautaciones de bienes, sanciones económicas, reclusión, y si procedía, la eliminación física. La construcción jurídica de la represión política que siguió a las eliminaciones selectivas e indiscriminadas de los primeros momentos de la sublevación, se materializó por parte de los vencedores en un entramado institucional especializado y coordinado, para castigar y doblegar a los denominados enemigos de España, como los Consejos Guerra, la Ley de Depuración de Empleados Públicos, las Juntas de Incautación de Bienes, el Tribunal Especial contra la Masonería y el Comunismo, los Tribunales de Responsabilidades Políticas y, más cercano en el tiempo, el Tribunal de Orden Público.
“Piénsalo”: en los nudos como el de ese padre hay mucha
España. Y tenemos que hacerlo. Tenemos que pensar qué ocurre en
nuestro país, democrático desde hace 39 años, porque tiene muchos
nudos que deshacer todavía. Uno de ellos lo tenemos en la garganta,
pero con poetas como David González, tal vez empecemos a conseguir
desbaratarlos. Otra opción es introducir en las aulas esta parte
de la historia olvidada. A ella dedicamos parte de nuestro blog esta
semana.
ACTIVIDADES:
- Describe con tus palabras cómo se sentiría esa anciana que narra la historia de su padre.
- ¿Crees que la poesía puede hacer algo para recuperar la Memoria Histórica de nuestro país?
- Si lees con atención en los Datos del Poeta, encontrarás que no es extraño que haga un poema como Historia de España (Nudo), ¿por qué?
- Visita el blog oficial del poeta. Busca un poema que te haya gustado y explica tu elección.
- Según algunas organizaciones, como la Asociación Para la Recuperación de la Memoria Histórica, en España todavía existen cerca de 114000 mil personas en las cunetas, ¿te parece normal que todavía ocurra esto en nuestra democracia?
- Busca información sobre las siguientes instituciones del franquismo: Ley de Depuración de Empleados Públicos, las Juntas de Incautación de Bienes, el Tribunal Especial contra la Masonería y el Comunismo, los Tribunales de Responsabilidades Políticas. ¿A qué se dedicaban y cuáles eran sus principales ocupaciones?
- Intenta hacer un caligrama con este poema. Inténtalo con cualquier tipo de nudo que conozcas (busca los tipos en el caso de que tengas dudas).
- En Cádiz se ha cambiado el nombre de la Avenida principal (Ramón de Carranza) por Avenida 4 de Diciembre (lee aquí la noticia), ¿qué te parece dicho cambio?
- Seguro que cerca tuya, en tu barrio, en tu ciudad, todavía se conservan nombres de calles, edificios, o estatuas que van contra la Ley de Memoria Histórica. Localízalos. Intenta descubrir cómo se llamaba antes del golpe de estado del 36. Propón un nombre alternativo para esas calles o para el lugar que ocupa el edificio o la estatua.
- Deja un comentario sobre el tema, el poema o el poeta. Este blog, como los demás, se alimenta de ellos.
Somos una democracia? Seguro?
ResponderEliminarBuena pregunta Francisco Martín Flores...
EliminarPues, sí, desde hace 39 años, si las cuentas del profesor no fallan. Pero la democracia no es la panacea, quizás el invento menos malo para organizarnos, supongo. O, de veras, alguien se cree a estas alturas que una democracia, por muy consolidada que estuviera( si fuera el caso), nos puede librar de nosotros mismos? Ser demócratas no nos suprime por arte de magia nuestra naturaleza humana. Lo de nuestra guerra civil, lo del holocausto nazi, fue " anteayer". Ninguna memoria de lo acontecido nos alejará de la posibilidad de repetir iguales o peores barbaries. La guerra 1001 que inventáramos sería igualmente horrorosa que la número 1, si no peor. Eso pienso, aunque me disguste.
ResponderEliminarRespecto al poema, me parece tan elocuente..., un retrato al que se le fuera retirando una tela que lo cubriera pausadamente. Me ha gustado mucho, un bolo en la garganta demasiado grande, difícil de pasar.
Gracias, profesor, por su puntual entrega semanal.
Puede que sea como dices, pero la reparación, por mínima que sea, hay que ejecutarla, sin duda.
EliminarComo suele decirse, uno a la semana no hace daño, pero te debo unas cuantas respuestas y eso me enfurece conmigo mismo.
Ja ja. Qué arte, profe!! No se enfurezca, por Dios!! Por pocas réplicas que me conceda seguiré en deuda con usted. Aunque, la verdad, he de confesar que cuando no la hay temo que sea porque he metido la pata ofendiendo a alguien sin querer. Y justito ahí me digo ' ni un comentario más, ésto es ridículo,...' Ja. Y justo al ratito, cuando vuelvo a leer su publicación dominical, NO ME SALE, ja, y vuelvo a comentar de puntillas pero incapaz de reprimir el ansia viva, ja ja.
ResponderEliminarSaludos desde donde se alija LO MÁS GRANDE.
Gracias.
Ya eliminaron el blog del poega
ResponderEliminarPoeta*
EliminarCierto, el enlace señala esa eliminación. Gracias por advertirlo.
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