V (de COMO LA LUZ DE LA LUNA EN UN MARTINI)

V

POLIBIO INTENTA CONVENCERNOS ALEGANDO: ¿HABRÁ QUIEN, PRESTANDO ATENCIÓN A ESTE HECHO, NO SE EMOCIONES CON SU RELATO? BUENO... RIEN DE REMARQUABLE, COMO APOSTILLARÍA MI ESTIMADO BENJAMIN CONSTAN, PERO VILLON DICE, MIRÁNDONOS CON SARCASMO: DE LA CORDE D´UNE TOISE SAURA MON COL QUE MON CUL POISE

No os inquietéis demasiado.
Pensad que todo esto que ahora nos perturba,
la gentuza que gobierna, la sinrazón
de cuanto sucede...
Seguramente no hemos de ver su fin. Pero es un parpadeo
en la Historia. No modificará
nada esencial
de lo que somos.
Siempre ha pasado igual;
Domiciano, Castro, Robespierre,
el Comunismo, Hitler,
esta democracia tan "correcta" que lo ha arruinado todo...
En el fondo, ¿qué es?
La devastación de los gobiernos,
el pensamiento asesinado por la Intelligentsia,
hasta el mayor horror de Mao, Stalin.
No deja de ser como un espanto de un seísmo.
Luego el mundo vuelve a lo suyo.
¿Sabéis que cambia de verdad la vida de los hombres?
Esas cincuenta y una jornada de la ILIADA,
LAS MENINAS, Leonardo, páginas de Montaigne,
el Balzac de Rodin, los viajes de Marco Polo,
las palabras de un hombre que murió en la cruz,
las palabras que alguien recordaría de Sócrates,
el infinito sueño de Buda, LAS BODAS
DE FÍGARO de Mozart, Shakespeare,
los delfines azules de Cnosos.

DATOS DEL POETA: JOSÉ MARÍA ÁLVAREZ (Cartagena, 1942). Poeta, narrador y ensayista es una de las figuras más cosmopolitas del panorama literario. Es Licenciado en Filosofía y Letras, Especialidad de Geografía e Historia (Universidades de Madrid y Murcia). Su vida ha estado consagrada a la Literatura y a los viajes. Su gran obra maestra es Museo de cera (Renacimiento).

Fuente: Página oficial del autor. Pincha aquí: http://josemaria-alvarez.com/index.html

COMENTARIO: Como la luz de la luna en un Martini contiene un título como la de esta entrada para cada poema. Y solo esta característica de Álvarez  como poeta ya valdría un comentario sesudo, perspicaz e irónico por mi parte. Sin embargo, no voy a detenerme en él, como tampoco voy a detenerme demasiado en contextualizar el punto de partida del poema. Estamos tan cansados de políticos, de la Historia Universal de la Infamia, que cualquiera podría poner otros nombres y otros referentes para llegar a la misma conclusión (yo, por ejemplo, donde pone comunismo, pondría capitalismo): los que dominan el mundo no hacen sino empeorarlo y más cuando creen que son una especie de élite o inteligentsia que están en posesión de la verdad o más allá del bien y del mal.

Por eso, lo que merece la pena resaltarse, primeramente, es la conclusión del punto de partida: esa Historia de despropósitos no son nada: son un espanto o un espasmo de un seísmo que sufrimos, pero que no cambia nada esencial en nosotros. Lo que sí cambia es atender a otras historias que nos pertenecen. Y aquí la elección del poeta se concreta magistralmente. Y mantengo esta afirmación, porque sus referentes son incuestionables: la Iliada, las Meninas, Montaigne, Rodin, Marco Polo, las enseñanzas de Jesús, de Sócrates, de Buda, la música de Mozart, Shakespeare, y esos frescos coloridos en Creta, configuran las raíces existenciales de cualquiera. La vida se sostiene en estos personajes, en estas historias, en estas obras de arte que hacen que la vida tenga cierto sentido frente a todo lo demás, que todo lo ha arruinado...

Estamos sumergidos en una vorágine de ruidos, enfrascados en asuntos profundamente superficiales que nos alejan de lo mejor del ser humano. Una hora con Montaigne, recitar como un credo las últimas palabras de Sócrates frente al tribunal o un monólogo de Hamlet, retratan la personalidad de este poeta que quiere sacarnos de la mediocridad en la que vivimos instalados. Y es que el autor se la ha jugado. Si hubiera fallado en su elección, el poema estaría cojo, incompleto. Me imagino la complejidad de cada una de sus decisiones, sopesando cada uno de sus referentes, midiendo cada milímetro de los versos. Ha sido valiente y acertó. Por eso me he sentido en la obligación de compartirlo con todos vosotros, porque necesitamos volver(nos) a nosotros mismos, volver a recuperar lo que nos llena y nos alienta, lo que nos hace mejores y quizás, algo más inteligentes o, por lo menos, evita que alimentemos lo prescindible, lo que nos sobra, lo que nos rodea y habría que eliminar de una vez por todas. Para eso está también este blog. Espero que el poema de Álvarez contribuya, sin duda, a este menester. 

ACTIVIDADES:

• Visita la página del poeta (o búscalo en las redes sociales). Elige otro poema que te haya gustado y explica tu elección.
• Busca información de algunos de los personajes históricos que nombra y argumenta su contribución para "arruinarlo todo". Incorpora otros posibles candidatos y explica tu elección.
• Busca información sobre la Intelligentsia, ¿qué te parece sus objetivos?, ¿cuál crees que eran sus errores fundamentales?
• El poema, de algún modo, trata también sobre la utilidad de la poesía. Busca en este blog, bajo esta etiqueta, otros poemas con la misma temática y responde: ¿crees que la poesía en particular y la literatura en general sirve para algo?
• Completa el poema con tu lista de referentes. Tienes que aumentarla añadiendo: una obra de arte (pintura, escultura, etc.), un poeta, un escritor, un personaje histórico, un músico, un tipo de música o una canción concreta. Intenta hacerlo como un poema que empiece con el siguiente verso: ¿Sabéis que cambia de verdad la vida de los hombres? No estaría demás que el título de tu poema siguiera el estilo del que nos ocupa esta semana.
• Si quieres dejar esta última actividad como comentario, bienvenido. Si no es así, puedes dejar otro comentario. Un blog se alimenta de ellos, como sabes.