LA BIBLIOTECA

El aire es allí diferente,

está erizado todo por una corriente

que no viene de este o aquel texto,

sino que los enlaza a todos

como un círculo mágico.

El silencio es allí diferente.

Todo el amor reunido, todo el miedo reunido,

todo el pensar reunido. Casi toda la muerte,

casi toda la vida y, además, todo el sueño

que pudo despejarse del árbol de la noche.

Y el sonido es allí diferente.

Hay que aprender a oírlo

como se oye una música sin ningún instrumento.

Algo que se desliza entre las hojas,

las imágenes, la escritura y el blanco.

Pero más allá de la memoria y los signos que la imitan,

más allá de  los fantasmas y los ángeles que copian la memoria

y desdibujan los contornos del tiempo,

que además carece de dibujo,

la biblioteca es el lugar que espera.

Tal vez sea la espera de todos los hombres,

porque también los hombres son allí diferentes.

O tal vez sea la espera de que todo lo escrito

vuelva nuevamente a escribirse;

pero, de alguna otra forma, en algún otro mundo,

por alguien parecido a los hombres

cuando los hombres ya no existan.

O tal vez sea tan solo la espera

de que todos los libros se abran de repente,

como una metafísica consigna,

para que se haga de golpe la suma de toda la lectura;

ese encuentro mayor que quizá salve al hombre.

Pero, sobre todo, la biblioteca es una espera

que va más allá de letra,

más allá del abismo,

la espera concentrada de acabar con la espera,

de ser más que la espera,

de ser más que los libros,

de ser más que la muerte.

DATOS DEL POETA:  Roberto Juarroz (1925-1995). Poeta y ensayista argentino, graduado en Biblioteconomía y Ciencias de la Información por la Universidad Nacional de Buenos Aires, miembro de la Academia Argentina de Letras y catedrático universitario. Ha recibió numerosos premios, entre los que destacan, el premio Esteban Echavarría, el premio Jean Malrieu de Marsella, y el premio de la Bienal Internacional de Poesía, en Lieja, Bélgica. La parte más importante de su obra está reunida en  un volumen bajo el título de Poesía Vertical.

COMENTARIO: Las Bibliotecas Escolares como fuente de recursos educativos y de aprendizaje no se concibe como un mero espacio en el que se custodian los libros y solamente se lee en silencio. Las Bibliotecas Escolares están concebidas para vertebrar alrededor de ella toda la vida de un centro educativo. Por eso la importancia fundamental de los coordinadores y de los equipos de apoyo es fundamental en esa tarea inmensa, a veces, ingrata, pero siempre reconfortante cuando se cree y se lucha por la calidad de la enseñanza. Esta semana, que se empieza a cerrar las Redes Provinciales de las Bibliotecas Escolares, queremos dedicar el poema de Juarroz a todos los bibliotecarios, coordinadores, equipos de apoyo de cada uno de los centros educativos de Andalucía; y así, modestamente, reivindicar su esfuerzo y su trabajo ejemplar al frente de cada una de ellas. También quiero aprovechar para reconocer la labor de nuestra red provincial y nos permitimos hacer un hueco en este comentario a una imagen de familia.

Porque es cierto que las bibliotecas deben ser un referente de los centros educativos, pero no debemos olvidar que la Biblioteca no es un ente abstracto o un espacio para el silencio. Creemos que, como deja entrever las palabras de Juarroz, la biblioteca, va más allá de la letra, más allá del abismo, y nos conduce, como docentes comprometidos con la lectura y la escritura hacia un lugar donde encaja la creatividad y la innovación, las redes sociales y las nuevas tecnologías y todo aquello que suponga mejorar como docentes y como personas. En estos años que hemos participado en la Red de Bibliotecas así nos hemos sentido, en una especie de círculo mágico, que ha creado un haz de vínculos más allá del mundo laboral. Y eso no es solo por los libros, como se supondrá.

La semana que viene será la última de este curso que acaba. Llegaremos a las 303 entradas y a más de 300000 visitas. Todo ello hubiera sido imposible, sin, entre otras cosas, la Red de Bibliotecas y los lectores atentos que hay en cada centro educativo. Ellos son nuestro baluarte y nuestro tesoro para que la Enseñanza Pública de calidad sea una realidad y no una quimera. Gracias a todas esas personas por estar ahí apoyando siempre cada una de nuestras propuestas, por arriesgadas que sean algunas de ellas. De alguna manera, a nosotros nos ha servido para salvarnos de nuestros propios demonios.

ACTIVIDADES:

Ya no es tiempo de actividades, pero si queréis, podéis hacer un comentario en esta entrada.