NIHILIDAD (POEMA DE BIENVENIDA AL ALUMNADO)
Este mundo, el mismo para todos, no fue creado por dios ni por hombre alguno, sino que siempre fue, es y será, un fuego eterno, que se enciende y se extingue según medida Heráclito De niños aprendemos el amor. Nos dicen que este cuerpo necesita otros cuerpos, el fuego del abrazo en que se funden el mundo y las rutinas; nos cuentan que palabras como familia, hogar o territorio entretejen los sueños y los huesos; nos hablan del pasado, animal mitológico; y en las fotografías conocemos historias olvidadas que recuerdan los padres y nos enseñan cómo se alimenta un incendio. De niños aprendemos la dureza del suelo y los cimientos, la pervivencia de lo humano y su memoria; nos hablan de un testigo, de la infinita permanencia del fondo y sus razones; nos dicen que el mundo es un equilibrio, una tensión polar según medida, que una piedra se apoya en otra piedra y debajo el sentido —una tortuga inmensa y confortable— nos aleja del vértigo, del terrible temor de estar sobre el abismo. De n...