EL PASO DE LAS HORAS
Sacudiremos los zapatos de lluvia
y buscaremos un lugar en lo alto para clavar las espinas de nuestra soledad.
Habrá pájaros encendidos cerca del cielo
y tú y yo pisotearemos descalzos todos los secretos.
La luz estará cerca de unas manos que parecen oscurecerse con el paso de las
horas
y los niños repartirán dientes de leche y una linterna.
Seremos eternamente infelices dentro del cristal
y habrá noches de terror infinito besando la sien de nuestros vestidos.
Nadie vendrá a abrazarnos
cuando caiga el rayo sobre nuestra almohada
y nuestros cuerpos destilarán el perfume de un huevo podrido
o de la tierra cuando engulle demasiados muertos y los escupe.
No poseeremos nada,
ni siquiera el filo almidonado de un espíritu que cae.
DATOS DE LA POETA: Angélica Morales (Teruel 1970) es poeta, novelista y directora teatral. Es Licenciada en Historia Antigua por la Universidad de Valencia y Diplomada en escritura jeroglífica, por la Facultad de Teología San Vicente Ferrer de Valencia. Entre sus poemarios destacamos: El sueño de la iguana (Utopía Libros, Córdoba, 2020); Las niñas cojas (Ediciones En Huida, Sevilla, 2019); España toda (Hiperión, Madrid, 2018); Desmemoria (Editado por el Gobierno de Aragón, 2012). Angélica Morales no se dedica solamente a la poesía. También es novelista (Mujeres rotas, 2018; La huida del cangrejo, 2010) y hace literatura experimental. Por ejemplo, en Cuidados básicos de una peluca en la que junto al artista José Manuel Ubé idearon, como ella misma reconoce, una novela "con cicatrices donde cada imagen es una ventana al interior, una trampa emocional o una carta cifrada que acompaña y guía al lector".
Ha recibido numerosos reconocimientos y premios literarios, más información en su página oficial de la que hemos extraído los datos anteriores: https://angelicamorales.wordpress.com/
COMENTARIO: La poesía no es una lectura fácil, necesitamos pensar, reflexionar, leer entre líneas, levantar la cabeza y darle vueltas a las palabras. La poesía nos empuja fuera de lo que se llama ahora nuestro estado de confort. Y sea solo por ese ejercicio intelectual, vale la pena acercarse a poemas como el de esta semana. Veámoslo:
Ya no hay tiempo para seguir encerrados, hay que salir afuera. Tenemos que caminar para encontrar nuestro lugar en el mundo y hacerlo desde la libertad: Sacudiremos los zapatos de lluvia, así comienza esta conquista lírica de la libertad. En la propuesta de Morales, esa libertad se construye saliendo al mundo para crear un hogar auténtico, fuera de ataduras (Habrá pájaros encendidos cerca del cielo), más limpio (la luz cerca de unas manos) y bello, tal vez. Un lugar acogedor para una pareja sin dobleces (tú y yo pisotearemos descalzos todos los secretos), un amor ideal; incluso para la familia, niños incluidos.
Pero paradójicamente, y he aquí parte del acierto del poema, la autora no promete volver o encontrar el paraíso perdido. En medio del poema, en medio del camino, con naturalidad, reconoce un hecho inevitable: Seremos eternamente infelices dentro del cristal/ y habrá noches de terror infinito besando la sien de nuestros vestidos. Desde estos versos, hasta el final, desglosa las consecuencias nada alentadoras de la decisión tomada.
El poema, como los mejores poemas, nos deja desconcertados, más cerca de la contradicción que de la certidumbre. Con la protagonista del poema, encontramos a la persona amada, a los niños compartidos, pero se evidencia la soledad o el aislamiento que se nombra delimitando un espacio de cristal que se nos antoja seguro, ¿tan seguro como una cárcel? Admitimos, al menos, que es un espacio aislado. El acto de libertad es elegir ese recogimiento, ese alejamiento del resto del mundo a expensas de renunciar a la felicidad, conscientes de que el terror no se deja atrás, porque habita dentro de nosotros mismos. Una especie de exilio elegido, impreciso en las fronteras, sin delimitación exacta, que nos traslada a un escenario sin mucha esperanza para alcanzar el bienestar. Y, sin embargo -¡de nuevo la contradicción, de nuevo la genialidad de la poeta!- se acepta ese pago con tal de no deber nada, no poseer nada. Es más fuerte el deseo de independencia que el de felicidad. Y eso nos une, como lector, como persona al tono que despliega Angélica Morales en El paso de las horas.
No poseeremos nada,/ ni siquiera el filo almidonado de un espíritu que cae. Aún así, Angélica Morales dice sí, pese al sufrimiento, la soledad, el dolor. Solo un espíritu libre y generoso, valiente, que comprende que ese aparente fracaso no es caer, puede tener la suficiente fuerza para ser capaz de decir sí pese a todo: queriendo y deseándolo, apoyada en el amor más auténtico. No conocemos personalmente a la poeta, nos hemos puesto en contacto con ella mediante las redes sociales, pero su generosidad y este poema en concreto, nos une y nos vincula de alguna manera para siempre. Desde aquí queremos darle las gracias por toda su amabilidad, delicadeza y atención con nuestro Proyecto Aniversario. Espero que disfruten del poema en su voz tanto como nosotros.
ACTIVIDADES:
- Explica con tus palabras el comienzo del poema, ¿te parece una manera adecuada de caminar hacia la libertad?
- Busca información sobre la expresión "paraíso perdido" y la relación con la historia de la literatura o de la poesía.
- Encuentra en este mismo blog, mediante el buscador o en las etiquetas, poemas que tengan que ver con la "inocencia" o "paraíso perdido".
- En estos tiempos que corren, todos las canciones, todas las lecturas, todos los poemas y cualquier texto parecen referirse a la situación extrema que vivimos. Nos ocurre desde hace meses y no creemos ser el único lector al que le pasa. No debe extrañarnos, el lector tiene que incorporar su bagaje vital en sus lecturas. Al menos si quiere ser un lector crítico y no quedarse en un plano de significación literal como ocurre a menudo en el aula. Podemos interpretar, por tanto, el poema de otro modo. Expón el tuyo propio.
- Busca un texto, un poema, una canción que antes de Coronavirus obviamente no hablaba de esa situación y ahora parece que sí. Justifica tu elección.
- Curiosamente Angélica Morales también sube un poema cada domingo en su blog oficial. Visítalo. Escoge uno de ellos, compártelo en redes y justifica por qué has elegido ese poema con tus seguidores.
- Deja un comentario en esta entrada: sobre el poema, la autora, el comentario, el Proyecto ANIVERSARIO o lo que quieras o creas oportuno.
Una maravilla de entrada. Redondísima. Un poema que es una auténtica joya, que hace que te inspires y te crezcas, al igual que también te lleva a sentir ese pinchazo en el corazón, cierta melancolía dolorosa. Bravo por ese "la poesía no es una lectura fácil / exige que reflexionemos, levantemos la cabeza y le demos vueltas a las palabras" del comentario. Y, como siempre, interesantísimas las actividades planteadas. Genial.
ResponderEliminarGracias amigo por tu valoración. Esta poeta merece la pena y su novela experimental tiene muy buena pinta también.
EliminarYo soy profesor de Filosofía y uso los poemas para profundizar en algunos temas de mis clases y, sobre todo, para fomentar la lectura crítica. Buscamos eso, crear alumnado con capacidad crítica, aunque sea, a veces, a contracorriente.
Saludos desde Marchena.
Una prueba más de que el mundo gira, por mucho que a veces uno quiera bajarse, es que vuelven los comentarios de Antonio y esas colaboraciones tan estupendas que nos va a regalar esta temporada.
ResponderEliminarHoy con permiso de la poeta he pensado hacer un poquito de tachismo.
https://drive.google.com/file/d/1Ayq2AT3Exzmjxi3X8v9FX6mpBPU7T3Bv/view?usp=sharing