FÓSILES



Antes, la basura estaba fuera de nosotros. Ahora está dentro. Los plásticos degradados que hace años proliferaban en escombreras y vertederos riegan nuestra sangre, fluyen por el interior, irrigándonos. Los metales pesados que siglos atrás dormían en la oscuridad de las montañas se depositan en las venas oscuras que serpentean por nuestros pies. La basura nos integra, nos forma y nos conforma, llega a nuestras células y se instala en la información genética; la basura que somos se propaga a nuestros hijos; los polímeros, vinilos y polietilenos absorbidos a través del pescado y el agua serán nuestros futuros fósiles. Al abrir nuestras tumbas dentro de quinientos años sólo encontrarán un esqueleto decorado con hilos de plástico. Un chisporroteo de huesos y cables de colores, macabro como el espinazo de una ballena varada, repleta de trozos brillantes de bolsas de supermercado. Confeti para la fiesta de la extinción masiva.



DATOS DEL POETAVicente Luis Mora (Córdoba, 1970) es escritor y crítico literario. Sus últimos libros son las novelas Centroeuropa (Galaxia Gutenberg, 2020) y Fred Cabeza de Vaca (Sexto Piso, 2017), el libro de poemas Serie (Pre-Textos, 2015), el dietario Micronesia. Fractales de literatura [1997-2021] (Universidad de Valladolid, 2021), la monografía La escritura a la intemperie. Metamorfosis de la experiencia literaria y la lectura en la cultura digital (Universidad de León, 2021), el ensayo La huida de la imaginación (Pre-Textos, 2019), el libro de aforismos Nanomoralia (Siltolá, 2017), y la antología La cuarta persona del plural. Antología de poesía española contemporánea (Vaso Roto, 2016). También ha practicado el monólogo teatral (Miguel, 2016), la escritura digital (70 palabras, LAVA, 2014; Blog decreciente, en El Boomerang, 2013-2016) y el hoax Quimera 322 (2010). Escribe crítica cultural en su blog Diario de lecturas.

Su libro Mecánica, al que pertenece el poema de esta semana, ha sido premiado con el 46è Premi Vila de Martorell 2021 (Hiperión).


COMENTARIO: Ahora que estamos celebrando la vida después de la muerte, tal vez, podríamos hacer una reflexión sobre lo que quedará de nosotros cuando hayamos muerto, cuando volvamos al polvo, cuando seamos cenizas de nosotros mismos. Y sin ponernos trascendentes, sin recurrir a religiones o mitologías, la reflexión puede hacerse desde la perspectiva del poema de Vicente Luis Mora, bajo nuestro punto de vista. Debemos leer literalmente este poema para denunciar el estado de conservación de nuestros mares y océanos. Y gracias a él, podemos crear conciencia ecológica. Los datos son objetivos y existen numerosos estudios que inciden en lo que todos sabemos, que nuestros mares son lo sumideros de la basura humana. No es difícil recordar las impactantes imágenes de las islas flotantes de plástico o los efectos negativos de los grandes animales marinos, las tortugas, por ejemplo, atrapadas y arrastrando plásticos sobre sus caparazones. Aunque, lo más preocupante, como nos recuerda Vicente Luis Mora, son los microplásticos que ya forman parte de nuestra cadena alimentaria inevitablemente. El problema es: ¿qué hacemos, podemos hacer algo más, podemos transformar esta sentencia a muerte, en la que somos víctimas y verdugos al mismo tiempo?

Sin duda, el acierto del poema para poner el foco en estos asuntos es determinante. Sin embargo, el poema resulta tan duro, porque desde el inicio nos sitúa ante una realidad apabullante que puede interpretarse desde otras miradas. La idea principal es que la basura está dentro de nosotros. Y si individualizamos ese concepto, los mierdas, si me permitís la expresión malsonante, somos cada uno de nosotros. Pero, ¿por qué somos unos mierdas? Si buscamos las claves en el poema, encontraremos algunas razones, sin duda. Pero tenemos que hacer un esfuerzo y nombrar o transformar el sentido de algunas palabras del poema. 

Por ejemplo, si nos quedamos con el siguiente fragmento: "Los plásticos degradados que hace años proliferaban en escombreras y vertederos riegan nuestra sangre, fluyen por el interior, irrigándonos". La lectura se transforma si nos preguntamos por otro sentido de plásticos. Si en vez de ello, pensamos que el elemento degradado, ese plástico que estamos repensando, es todo aquello que prolifera en escombreras como las redes sociales, y entendemos que los vertederos recogen a menudo los mensajes de odio, machistas, xenófobos, racistas, etc.; entonces, podemos entender que en nuestro interior, ese odio, ese machismo o esas actitudes xenófobas y racistas ya fluye con naturalidad y riega toda nuestra personalidad.

El poema entonces se hace casi insoportable, porque no olvidemos que la basura que somos se propaga a nuestros hijos. Esta certeza es tan difícil de asumir por cualquier padre o madre, por cualquiera que tenga algo de conciencia, que convierte al poema así leído en una experiencia inaguantable, intolerable. Porque nadie, en su sano juicio, desea hacerle un mal a lo que ama y le es afín o familiar. Pero, no obstante, ocurre. Y, por eso, me temo, nos convertimos, perdonad otra vez la expresión, en unos mierdas que arruinan su propia existencia: los mares, en el caso literal del poema, el día a día en la otra lectura que estamos presentando. La pregunta, curiosamente, es la misma en ambos casos. ¿Qué podemos hacer para no seguir perpetuando este desastre (ecológico o personal)?

Yo no sé la respuesta en ninguno de los dos casos. Pero, hoy que es el día de resucitar, de entender esa palabra, tal vez, la única forma de dejar de ser un mierda es optar por comenzar una nueva vida. Al menos, no continuar con las mismas actitudes que perpetúan los metales pesados en nuestra sangre, emponzoñando lo que debería dar vida y ser todo lo contrario: no se puede dañar a lo que nos sostiene (ni en el sentido ecológico, ni en el personal o psicológico).

Agradecemos la generosidad de Vicente Luis Mora con nuestro blog y con el Proyecto la voz de la poesía, que intenta acercar poetas vivos a las aulas.


ACTIVIDADES

  • Busca información sobre los polímeros, los vinilos y los polietilenos. ¿Para que se utilizan, en qué objetos cotidianos los encontramos? Busca información sobre el daño que pueden causar en la alimentación de los seres vivos y en el propio hombre.
  • Visita la página oficial de Vicente Luis Mora: Diario de lecturas. Extrae del mismo algunas entradas que te hayan llamado la atención y justifica tu elección. 
  • Intenta responder a estas preguntas que aparecen en el Comentario relacionadas con la contaminación de los mares: ¿qué hacemos, podemos hacer algo más para evitar esta contaminación?
  • Por cierto, ¿por qué somos víctimas y verdugos cuando contaminamos los océanos?
  • Hace algunos años ya, estas fotografías se hicieron muy famosas porque obtuvieron premios importantes a nivel internacional.



Descubre a la fotógrafa Mandy Barker, puedes ver su trabajo aquí: https://wepresent.wetransfer.com/stories/ucp-mandy-barker. ¿Qué te parece su trabajo? ¿Crees que el arte, la fotografía, pero también, la poesía puede servir para crear conciencia ecológica? Justifica tu postura.

  • Tal vez no haya que ir al mar para denunciar mediante una foto la falta de conciencia ecológica. Quizás en tu propia aula, en el patio de tu centro, en la calle, en un parque, en el campo, en un lugar que frecuentes encuentres una imagen para realizar una foto que demuestre la falta de conciencia ecológica en nuestro día a día. Haz dicha foto, edítala de la manera más profesional que pueda y crea una exposición en tu aula o en tu centro con todo ese material.


  • ¿Qué son las expresiones malsonantes?, ¿existe diferencias entre un insulto y dichas expresiones? Haz una lista con expresiones malsonantes y compárala con tus compañeros y compañeras. ¿En cuáles coincidís?, ¿hay alguna en la que no estéis de acuerdo? Explicad vuestras posturas.
  • Lévi-Strauss llama mitemas a los segmentos mínimos de una narración mítica, de la misma forma que los fonemas existen en fonética o los morfemas en morfología, como unidad mínima significativa del relato mítico. Es un motivo que tiene una cierta consistencia propia y que puede repetirse en otras mitologías. Por ejemplo, la Virgen con el Niño o el abandono del niño que será héroe en un río. Tiene más que ver con imágenes que con texto exacto. Busca ejemplos de dioses que resucitan. Por ejemplo, Osiris, Adonis, Tammuz, Odín o Fénix. También pueden servirnos algunas diosas que entraron al reino de los muertos y volvieron como Inanna o la propia Perséfone. ¿Qué enseñanzas puedes extraer del concepto de resurrección en estas distintas deidades? 
  • Vicente Luis Mora también escribe aforismos, si quieres puedes intentar realizar algunos. Te dejamos este material de apoyo
  • Si quieres leer algunos poemas en prosa, en este blog, encontrarás, entre otros, los siguientes: Aldea, de Alberto Guirao; Me encanta Dios, de Jaime Sabines; La hora detenida, de Jennifer García; Las cosas del campo, de José Antonio Muñoz Rojas; Call Center de Pablo García Casado. 
  • Se acerca el Día del Libro y desde las BECREAS de Marchena os proponemos las siguientes actividades. 


Si quieres saber algo más, pincha aquí.

  • También puedes dejar un comentario en esta entrada.

Comentarios

  1. "Qué bonito es querer a todos los seres que nos acompañarán por siempre. A aquellas personas que nos cuidarán, nos mimarán y nos avisarán de todo aquello que nos pueda hacer daño en todo lo que nos queda de año."
    Raquel, Leandro, Rocío, Javier y Kike. ( 6° B)

    Rescatado de una gota de un arcoiris vuestro. Quiero pensar, me lo invento, que los nombres que figuran son los de esos seres en los que tan ciegamente confía el que escribe. Ese salto al tiempo verbal de futuro con esa certeza como si de pasado se tratara me resultó conmovedor. Quien lo escribió en su día poco plástico acumulaba en su interior aún. Qué fe más bonita; es un espectáculo ser testigo, tan limpia que sería comparable, cada uno en su género, al asombro y deleite experimentados cuando uno contempla el brillo de un pelo nuevo de tan sólo tres o cuatro años. Así vi yo esa idea, con cero basura; ni la melena ni el pensamiento retornan nunca jamás a ese brillo primero... pero estuvieron y es un gusto cada vez que se nos muestra.

    Saludos, compañero.
    Y gracias por tu 'poemerío' que como buen antídoto del plástico nos puede aliviar.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ojalá sea así y esta entrada sirva para remover consciencias también. El peligro no es sólo exterior, no podemos desprendernos fácilmente de lo que somos ni de lo que hacemos...

      Eliminar

Publicar un comentario